Un nuevo cáncer colorrectal mostró resultados positivos en un ensayo clínico de fase 1 para demostrar que el enfoque es seguro.
Los pacientes tratados no presentaron signos de efectos adversos graves y las muestras de sangre contenían marcadores de activación inmunitaria, un primer indicio de que la vacuna podría activar las células inmunitarias para combatir los tumores colorrectales y las metástasis. Próximamente se realizarán más pruebas para determinar si la vacuna es eficaz para frenar el crecimiento tumoral.
Cáncer de colon, especialmente en personas jóvenes, va en aumento y es actualmente la segunda causa de muerte por cáncer en EE.UU. y en todo el mundo. La cirugía puede curar la enfermedad en muchos pacientes, pero el pronóstico es malo para los que sufren recidivas. Si resulta eficaz en ensayos a mayor escala, la vacuna, desarrollada por investigadores de Jefferson (Universidad de Filadelfia + Universidad Thomas Jefferson), podría entrenar al sistema inmunitario del paciente para atacar el cáncer de colon que ya se había extendido antes de la cirugía.
"Hay una necesidad urgente de comprender qué impulsa el crecimiento del cáncer colorrectal y de aprovechar ese conocimiento para desarrollar nuevas terapias. Este estudio crucial aporta algunas de las primeras pruebas de que es posible dirigir con seguridad el sistema inmunitario del propio paciente para que busque y destruya este tipo de cáncer. Se trata de un verdadero hito, que ha sido posible gracias al trabajo sincronizado de científicos y médicos de nuestro equipo de cáncer colorrectal", ha declarado Karen E. Knudsen, vicepresidenta ejecutiva de Servicios Oncológicos y directora del Sidney Kimmel Cancer Center - Jefferson Health.
En trabajos preclínicos anteriores en ratones, los investigadores del Jefferson demostraron cómo funcionaba el diseño de su vacuna. Históricamente, las vacunas contra tumores se han desarrollado contra una especie de señal molecular del cáncer. Al proceder de células normales, las células cancerosas comparten casi todas las mismas moléculas, lo que dificulta al sistema inmunitario diferenciar lo normal de lo canceroso. Los antígenos tumorales son moléculas que el sistema inmunitario puede reconocer como diferentes de las normales. En el cáncer colorrectal, una de estas moléculas, denominada GUCY2C, fue identificada por el Dr. Scott Waldman, Catedrático Samuel M.V. Hamilton y Director del Programa de Cáncer Gastrointestinal del Sidney Kimmel Cancer Center - Jefferson Health.
La vacuna desarrollada por el primer autor, el Dr. Adam Snook, profesor adjunto del Departamento de Farmacología y Terapéutica Experimental, el Dr. Waldman y otros, funciona activando el sistema inmunitario contra la molécula GUCY2C. Al unir la molécula GUCY2C con una molécula que potencia la reacción inmunitaria denominada PADRE, y cargarla en un vector de adenovirus, los investigadores diseñaron una vacuna que podía dirigirse específicamente contra el cáncer de colon.
En el ensayo clínico actual participaron 10 pacientes con cáncer de colon en estadio I o II. Los pacientes recibieron una dosis y volvieron para extracciones de sangre 30, 90 y 180 días después de la inmunización. Los pacientes experimentaron algunas molestias en el lugar de la inyección, pero no notificaron efectos secundarios graves de la vacuna. Las muestras de sangre mostraron la activación de "células T asesinas", el tipo de célula inmunitaria que los investigadores esperaban. Estas células T asesinas se encargan de encontrar y eliminar las células cancerosas del colon responsables de la reaparición del cáncer.
"Nos estamos preparando para un estudio de fase II que empezará a reclutar pacientes este otoño", dice el Dr. Snook. "Aprovechamos las lecciones aprendidas en el primer estudio para modificar la vacuna y, con suerte, hacerla aún más eficaz".
Desde el inicio del ensayo, los investigadores descubrieron que otros tipos de cáncer, además del colorrectal, también expresan GUCY2C, como el gástrico, el esofágico y el pancreático. Estos cánceres se encuentran entre los más mortíferos. De hecho, junto con el cáncer colorrectal, estos cuatro tipos de cáncer representan el 20 por ciento de todas las muertes relacionadas con el cáncer.
"El objetivo del estudio que comenzará este otoño es demostrar que la versión 2.0 de la vacuna es aún mejor y que puede beneficiar a un grupo mucho mayor de la población general de pacientes con cáncer", afirma el Dr. Snook.
Fuente: Universidad Jefferson